IGLESIA DE SAN PABLO DE ÚBEDA

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Iglesia de San Pablo (ÚBEDA)

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martes, 3 de diciembre de 2013

SEGUNDO PREMIO EN ÓLVEGA (SORIA)

ACABO DE ENTERARME DE LA CONCESIÓN DEL SEGUNDO PREMIO DE POESÍA

Certamen de Poesía Milagros Cacho Párraga

 EN ÓLVEGA(SORIA) POR MI POEMA: "10 A.M. Celebración, olvido, desencanto".



DIEZ (a.m.): CELEBRACIÓN. OLVIDO. DESENCANTO.




Nadie se acuerda, pero es mi cumpleaños, estoy casi segura.

Nadie me pregunta porqué llevo tan temprano el pelo suelto

y las entrañas con rímel. Amanece bronca,

pero echo un reojo al almanaque y me cercioro

antes de llorar en las tostadas.



El juez de la costumbre archiva mi denuncia por falta de preaviso

(me recuerda que han de pasar al menos veinticuatro horas)

y les otorga a ellos el beneficio de la duda.

Se fueron, los unos a la escuela, el otro a la oficina,

y yo me quedo sola sorbiendo un café con estricnina

y soplándome las velas, como siempre.



Me planteo, mientras quemo con la plancha una corbata,

la rebelión más silenciosa, una huelga de celo,

repartir pasquines por todos los rincones de la casa

pidiendo un referéndum por mi independencia,

pero no es constitucional, según han dicho por la radio en la tertulia.



A la vez, mi imaginación vuela por las nubes, libérrima,

sabiendo que cualquier electrodoméstico caliente es un lastre

y todo plan de vuelo una hipótesis adolescente que acaba en simulacro.

Cómo odiaba los días con horarios y patrones de conducta

y sin embargo mi vida es una fotocopia pegada con imanes en el frigorífico,

en el que están a punto de caducar dos yogures desnatados y algunas ilusiones.



Hay algo que se inflama en las meninges cuando paso al lado del espejo

y escucho un susurro derrotado, un aliento en ciernes

que me cuchichea al oído: “te vas abandonando a la estulticia”,

¡el miserable!,

o me pregunta por aquella chica pizpireta que antes se asomaba por mis ojos

y que hace un tiempo que no viene.



Se desgarra un canelón en mi intestino cuando se oyen estas cosas,

y pongo a cocer lentejas que fueron lentejuelas no hace tanto,

busco “estulticia” en un diccionario de sinónimos

y me derramo encima un bote de tomate frito

como si me hubieran acribillado la ternura

a ráfagas de ninguneo.



Me refugio en el tráfico y en el murmullo de las nimiedades.

Levanto una tormenta en el desierto de mi alcoba

con la harina de rebozar croquetas

y quisiera dormirme acurrucada en un peluche

y que me despertaran con un pétalo.





Pienso en todas las renuncias implícitas que no firmé y en las que sí.

En los romances dulces de los trece años a la puerta del colegio.

En los besos torpes que sabían a bollycao y a mandarina.



Definitivamente no me queda ningún síntoma

de aquella felicidad que me diagnosticaron.

lunes, 11 de noviembre de 2013

POEMA PRIMER PREMIO "PAN DE TRIGO" LA SOLANA 2013




Con Juani Torrijos, recibiendo el premio.
 NO SÉ ESCRIBIR POEMAS DE AMOR, Y TÚ LO SABES.




Eres tú –y con este comienzo me viene a la memoria Mocedades-

mi fortaleza.

Aunque no sé si se llamaba fortaleza o a qué otro nombre respondía

ese espacio exento de carreras cuando jugábamos de niños:

El hogar –decíamos- el recinto, la casa, el santuario…

el refugio donde uno podía dejarse reposar tranquilamente

y todo el mundo se paraba,

y todo el mundo respetaba aquel remanso

hasta que por fin volvía el resuello a los pulmones.



Eres certidumbre en los rincones de mis dudas: Si dices sí,

me parece posible cualquier atrevimiento,

cualquier cosa,

aunque a veces incluso asientes sin los labios y a veces

tu silencio amortigua las bisagras que chirrían en mi espíritu

o tu sonrisa lustra con el bajo de su enagua

las alas sucias de mis mariposas y no necesito que me hables.



Si dices no, saltan las alarmas siderales y se activan

los frenos de emergencia de esta locomotora pusilánime;

llueve calma sobre la osadía, se empanan mis surcos cerebrales

y los nimbos que nublaban mi criterio deponen su actitud

sabiéndose advertidos,

porque -cuando se me olvida tu paraguas-

yo me dejo llover muy fácilmente.



Sé de arreboles que madrugan y de cielos poco precavidos

que pagan entrada de tribuna para mirar tus ojos y copiarlos.



Algún día te contaré los denuedos para protegerte de dragones

que te asedian todas las noches en mis pesadillas,

o cómo soy capaz

de dibujar tu contorno en el espacio con la yema de mis dedos

sin equivocar una sola directriz en el ciego esbozo de tu partitura.



No sé si se trata de querer más que cualquiera

-esto no es competencia que pueda aquilatarse-

yo tan sólo mantengo tres certezas grabadas en mi mente a fuego:

No cambiaría estar contigo por nada que pudieran ofrecerme.

Repetiría hasta el infinito cada segundo que hemos disfrutado.

Y la tercera debe ser algo parecido

a acariciar juntos terciopelo o a sentir -como la primera vez que nos besamos-

cada noche de nuevo primerizas

aquellas hormigas revoltosas debajo del embozo.



Nunca escribo poemas de amor y tú lo sabes.

¡Hay tanto junto a ti…! que tal vez lo malgasto y no lo venero como debería,

lo dejo aquilatarse en mi bodega, lo cuelgo en mi memoria

como un abrigo cotidiano que me suelo poner todos los días

y por eso, por el uso deslucido, en su comodidad de tantos años,

no reparo en la calidad de su tejido incomparable y sus hechuras,

aunque, si salgo a la calle sin él, me noto desnudo por dentro;

si le produzco cualquier roce con un restregón de la rutina

lloro a solas sin que tú me veas;

si se aja con la herrumbre de cada aniversario que casi se me olvida

me procuro tu perfume en la droguería de guardia y vuelco su esencia para resarcirme,

y vuelvo a ser consciente del hecho extraordinario

que supone para mí rendirte pleitesía, medirte la cintura,

rozar las pestañas donde nace el torbellino,

enredar nuestros dedos sin querer cuando salimos a la vida,

perder la brújula en tus ojos o asumir la madurez como un regalo,

incapaz ya de afrontar cualquier vicisitud sin ti,

la mejor dádiva posible que pudo el destino depararme.



Para terminar, sólo decirte que te quiero…

porque no sé escribir poemas de amor, tú ya lo sabes.

martes, 8 de octubre de 2013

MICRORRELATOS DE ABOGADOS

Creo que, aunque sea por cansino, ya deberían darme el premio mensual de este certamen. He vuelto a ser elegido entre los 21 finalistas mensuales de septeimbre 2013. Os dejo el enlace por si os apetece leer mi "DIÁLOGO DE BESUGOS".

http://www.microrrelatosabogados.com/historico1.asp?mes=9&ano=2013&ed=5

Saludos cordiales.