IGLESIA DE SAN PABLO DE ÚBEDA

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Iglesia de San Pablo (ÚBEDA)

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domingo, 19 de marzo de 2023

PRIMER PREMIO DE POESÍA EN VÍCAR

 

 Ya tenemos los ganadores del XXVI CERTAMEN DE MUJER Y LITERATURA “APRENDIENDO A AMAR” En las modalidades de relato corto y poesía que organiza la Concejalía de Mujer del Ayuntamiento de Vícar.
Esta mañana ha tenido lugar el fallo del jurado formado por las concejalas del Ayuntamiento de Vícar, las profesoras de lengua de las dos institutos del municipio, la representante de la asociación de mujeres Caliza y varias técnicas del centro de la mujer.
La entrega de premios será el día 24 de marzo en La Casa de la Juventud y el Deporte.
GANADORES DE LA MODALIDAD DE RELATO CORTO:
🥇1º Premio
María Victoria López Jiménez con su obra “Flores cortadas”
🥈2º Premio
Alfonso Fernando Quero González con su obra “El señor de la noche”
GANADORES DE LA MODALIDAD DE POESÍA:
🥇1ºPremio
Esteban Torres Sagra con su obra “Ma-má-riposa”
🥈2ºPremio
Iris Graciela Zurschmitten Juárez con su obra “Ayúdame a soñar”

                            MA-MÁ-RIPOSA


Mamá ya no sonríe, ya no canta:

un jilguero muy triste

que ya no come alpiste 

es como si tuviese en la garganta.

Y sus labios -dos pétalos marchitos

que mueren en la sombra

si mi papá la nombra-

solo dejan salir algunos gritos.

 

Cuando había luz en su mirada

lucían como estrellas

sus dos pupilas bellas

antes de culminar la madrugada;

pero mi padre dijo que miraba

con ellos a otros hombres

que no tenían nombres,

y en vez de preguntarle la insultaba.

 

De la escuela muchas veces regreso 

yo solo, sin amigos,

por no tener testigos

que la vean llorar al darme un beso;

apagada, perdida y temblorosa, 

sin perro que le ladre,

no parece mi madre

la niña que naciera mariposa.

 

En sus alas, de dulce caramelo,

atravesaba el aire:

hasta el primer desaire

mi mundo era de azúcar en su vuelo;

sus timones se volvieron añiles

y los cardenales

mostraban las señales

de linchamientos a manos muy hostiles.

 

He ido archivando, subido al podio

del cariño materno,

dibujos de cuaderno:

escenas de mi padre donde el odio

cómplice me hacía sentir culpable

por no poner remedio

a aquel maldito asedio

de un hombre posesivo y miserable.

 

Y me volqué con ella, fui su paño

de lágrimas asiduo,

el único residuo

de amor que la acompañó año tras año.

Por fin me convertí en adolescente

y antepuse mi credo

al terror de mi miedo

enfrentándome al ogro frente a frente.

 

Le amortigüé sus golpes sin clemencia,

mis brazos, más fornidos,

y mis ojos convencidos

notificaron su última advertencia. 

Sin duda el descubrió la preferencia

en mi mirada fría

y supo que no habría

ninguna otra agresión ni más violencia. 

 

Mamá ahora ya sonríe y, a veces, canta;

un jilguero contento

que viviera en su aliento

es como si tuviese en la garganta;

y sus labios -dos pétalos de rosa 

que florecen de prisa-

la aúpan en la brisa

y vuelve a ser, de nuevo, mariposa.


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